Aquí me encuentro, Señor, buscando acercarme a Tu amor y a Tu corazón, buscando Tu perdón.
En Tus manos deposito mis lágrimas y mi dolor, confiando en Tu misericordia y en Tu compasión.
Reconozco mis faltas y errores, y humildemente te pido que me perdones por todo aquello que haya entristecido Tu corazón.
En este momento de introspección y arrepentimiento, busco fortaleza en Tu presencia y consuelo en Tu amor incondicional.
Reconozco mi fragilidad y mi necesidad de Tu guía y protección.
Permíteme sentir Tu abrazo de paz y consuelo, y permíteme experimentar la gracia y el perdón que solo Tú puedes brindar.
Que mis lágrimas sean una ofrenda sincera de arrepentimiento, y que mi dolor sea transformado por Tu amor sanador.
Que mi corazón se ablande ante Tu misericordia infinita, y que mi alma encuentre paz en Tu presencia divina.
Te pido, Señor, que me ayudes a dejar atrás el pasado y a caminar hacia un futuro iluminado por Tu luz y Tu amor.
Gracias, Señor, por escuchar mis palabras y por acoger mi corazón contrito.
Confío en Tu bondad y en Tu perdón, y me entrego a Ti con humildad y gratitud.
Amén.
