Con
el pasar de los años, los medios de comunicación se han ido perfeccionando
permitiendo que la comunicación entre las personas se realice de
una forma más simple.
La
distancia ha sido un problema en la comunicación de las personas,
para poder hacerle frente en la antigüedad se utilizaban diferentes
medios como mensajeros, humo, palomas mensajeras y piedras en
las que escribían. Con el transcurrir del tiempo han surgido inventos como la
imprenta, el telégrafo, teléfono, la radio, el fax, televisor y el
Internet que han hecho mucho más fácil el poder estar en contacto con los
que se encuentran en lugares alejados en tiempo real.
En
nuestros días podemos ver que la tecnología ha hecho mucho más
accesible el poder estar comunicados con los demás de forma más directa e
inmediata.
Es
muy necesario estar en contacto con nuestros seres queridos y, de igual forma,
necesitamos estarlo con Dios. El medio por el cual podemos
comunicarnos con nuestro Padre es la oración, y podemos decir
que es mucho mejor que el telégrafo, una paloma mensajera o un
teléfono inteligente en nuestros días.
La
oración nos lleva a una relación más íntima con Dios, la distancia no es un
impedimento porque podemos sentirlo muy cerca de nosotros.
Jesús nos enseñó que debemos pasar tiempo con el Padre
para poder contarle cómo nos fue en el día o si tenemos algún problema,
Dios siempre estará dispuesto a escucharnos cuando decidamos
buscarlo en oración.
“Perseverad
en la oración, velando en ella con acción de gracias...”. Colosenses 4:2
¡Nuestra
comunicación con Dios debe ir perfeccionándose cada día!