Manual de Estudio Bíblico para Mujeres
2009
Por Sandra Valadez de García
INTRODUCCION
“Vivir en el Espíritu” es vivir en la
plenitud de Dios. Esto significa un cambio radical en nuestra forma de ser y de
actuar. Es dejar atrás todo aquello que nos impide tener una relación correcta
con Dios para dirigirnos a la santidad y poder entrar en su presencia.
Aún el temor y la ansiedad pueden ser
una barrera para una comunión íntima con Dios al no permitir que nuestra
fe sea depositada verdaderamente en él. (Romanos 14:23 “... porque no lo hace
con fe; y todo lo que no proviene de fe, es pecado.”)
Al identificar el pecado y las
debilidades en nuestra vida debemos reconocer que necesitamos cambiar, sin
embargo, para algunas mujeres parece que esto fuera difícil o imposible.
El problema surge cuando intentamos
hacerlo nosotras mismas, en nuestras propias fuerzas, el resultado es
limitado y hasta temporal.
El cambio debe ser profundo y
permanente, de adentro hacia afuera, y aquí es donde necesitamos a Dios.
Lo único que nos puede transformar radicalmente es el poder del Espíritu Santo.
¡Es posible cambiar!
La enseñanza de temperamentos que
trataremos aquí es tan solo una herramienta para comprender la manera en que
actuamos.
El propósito al introducirnos con este
tema es entender que debemos rendir nuestra vida total (1 Tes. 5:23) al dominio
del Espíritu Santo. Esta rendición incluye las fortalezas y debilidades de cada
persona. Como mujeres, involucra fuertemente el área emocional.
“Vivir en el Espíritu” es vivir en
victoria sobre el pecado y no el pecado en victoria sobre nuestra vida, lo
segundo nos conduce a una vida mediocre y de auto engaño en Cristo.
Una buena manera de saber si “andamos en
el Espíritu” es la forma en que reaccionamos ante las situaciones impredecibles
de la vida, cuando las personas y circunstancias están fuera de nuestro
control. Podemos seguir reaccionando emocionalmente, pero Dios nos pide
responder con santidad, con el carácter de Cristo. (Gálatas 5:22-23 “Mas el
fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.”)
Hemos permitido demasiado que las
circunstancias y las emociones nos gobiernen, entonces ¿Para qué sirve el
libre albedrío si no somos capaces de estar por encima de éstas? Dios nos
regaló un libre albedrío para tomar las mejores decisiones para nuestra vida.
Elige bien y rinde tu voluntad al Rey de reyes y Señor de señores. “Antes, en
todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.”
Romanos 8:37
EL TEMPERAMENTO
CAPITULO 1
Temperamento, carácter y personalidad
pueden parecer términos semejantes, pero estableceremos la diferencia
entre ellos y trataremos el tema de temperamento.
Temperamento: Es una característica
presente en nuestro comportamiento o conducta, está basado en una
disposición genética en el momento de la concepción, así como el color de los
ojos y cabello, la forma del cráneo y el rostro, la estatura y la forma
corporal general, el cociente de inteligencia y la expresión de las emociones y
reacciones.
Carácter: Es la suma del temperamento más la educación recibida,
el contexto familiar, cultural y social en que se desenvuelve el individuo.
Personalidad: Conjunto de rasgos externos que definen a una persona.
Es la forma de enfrentarse al medio en que un individuo vive. De alguna
manera es la “máscara” o fachada con que nos presentamos ante los demás, sin
que ésta tenga que ser necesariamente auténtica.
Dentro de la personalidad se incluye el
temperamento y el carácter.
Clasificación del temperamento
El temperamento junto con las
características físicas, mentales y emocionales es lo que hace que seamos
únicos. Ejerce una gran influencia sobre el comportamiento humano, aunque no lo
determina completamente.
Hablar del temperamento puede ser una
puerta para entender qué nos motiva a comportarnos de cierta manera.
Los cuatro temperamentos básicos son:
Introvertidos: Melancólico y Flemático
Extrovertidos: Colérico y Sanguíneo
Debemos tener en cuenta que nadie está
constituido por un solo temperamento. Hay una variable combinación de
ellos. Lo importante es reconocer el temperamento dominante e identificar
defectos y virtudes con el propósito de llevarlos al Espíritu Santo, podemos
con su ayuda superar los defectos y utilizar al máximo nuestras cualidades.
Una breve descripción de fortalezas y
debilidades de cada temperamento:
Temperamento - Fortalezas - Debilidades
Melancólica “Hagámoslo de la manera
correcta”
Flemática “Hagámoslo de la manera más
fácil”
- amante de la música y arte
- gran sensibilidad
- capacidad analítica
- fiel y sacrificada
- perfeccionista
- le gustan las tareas de precisión y
análisis
- auto disciplinada
- apta para trabajos creativos e
intelectuales
- trabaja a conciencia y con eficacia
- es talentosa y con rasgos de genialidad
- conoce sus propias limitaciones
- confiable y equilibrada
- de humor placentero y pocas palabras
- bondadosa
- conciliadora
- amistades numerosas
- constante y fiel
- diplomática y pacificadora
- sabe escuchar
- fiel a la amistad
- trabaja eficientemente
- práctica y sencilla
- planificadora
- confiable
- discreta
- melancólica y depresiva
- pesimista
- le gusta sufrir
- orgullosa
- critica las imperfecciones de otros
- exige perfección
- temerosa de lo que otros piensen de
ella
- resentida
- antipatía por quienes no piensan como
ella
- indecisa
- poco decidida
- analiza excesivamente
- falta de confianza en sí misma
- pesimista y temerosa
- se aflige y preocupa fácilmente
- pasiva e indiferente
- se amolda a las circunstancias
- farisaica
- rehúye a comprometerse
- egoísta
- terca
- causa molestias a quienes le disgustan
(sarcástica)
- no se caracteriza por ser cordial
- lenta y perezosa
- indecisa
- se auto protege y resiste a los cambios
Temperamento Fortalezas
Debilidades
Colérica “Hagámoslo a mi manera”
Sanguínea “Hagámoslo de la manera más
divertida”
- segura y firme en sus decisiones
- voluntad tenaz y auto determinación
- optimista
- auto suficiente
- audaz y valiente
- no pierde el ánimo
- líder firme, decidida
- sabe juzgar a la gente
- motiva a los demás
- buena organizadora y promotora
- sumamente práctica
- no la desalienta la oposición
- se propone metas y las alcanza
- cálida y vivaz
- carismática
- comunicativa
- despreocupada
- excelente narradora de cuentos
- vive el presente
- conversación contagiosa
- disfruta todo
- hace amigos fácilmente
- optimista y agradable
- no le cuesta pedir disculpas
- tierna y comprensiva
- comparte las penas y alegrías de otros
- don para cuidar enfermos
- no le cuesta empezar planes y
proyectos nuevos
- ira
- insensible a necesidades ajenas
- poco emocional y fría
- poco aprecio por detalles estéticos
- cruel, cortante y sarcástica
- impetuosa y violenta
- le disgustan las lágrimas. Poco
compasiva
- toma decisiones por otros
- tiende a ser dominante
- usa a la gente en su beneficio
- vengativa
- demasiado segura de sí misma
- poco analítica
- difícil de complacer
- llora con facilidad
- emocionalmente imprevisible
- arranques de enojo
- exagera la verdad
- no tiene control de sí misma
- toma decisiones emocionales
- quiere dominar la conversación
- no es atenta
- no tiene fuerza de voluntad y sus
convicciones son débiles
- depende de la aprobación de otros
- disfruta a la gente y luego la olvida
- olvida sus promesas y compromisos
- desorganizada, indisciplinada
- no termina lo que empieza
- se distrae fácilmente
GUIA DE REPASO
CAPITULO 1 “EL TEMPERAMENTO”
Completa los espacios en blanco con las
palabras correctas.
1. Característica presente en el
comportamiento por una disposición genética Temperamento + educación + contexto
familiar, cultural y social Conjunto de rasgos externos que definen a una
persona
2. Los temperamentos básicos son:
3. ¿Cómo te clasificas a ti misma?
(Aunque hay combinaciones, un temperamento predomina más).
4. Escribe las fortalezas y debilidades
que detectas en tu temperamento: Fortalezas:
Debilidades: Y el mismo Dios de paz os
santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea
guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo. 1Ts 5:23
PLAN DE ACCION
Con una lista de tus debilidades y
fortalezas ora para que intervenga el Espíritu Santo en tu vida. Pide su ayuda
para superar tus debilidades y utilizar tus fortalezas para la gloria de Dios. Estableciendo metas: Vencer la debilidad que más te causa
problemas.
TRANSFORMADAS
CAPITULO 2
Una de las luchas frecuentes con el
pecado, nuestros malos hábitos y debilidades, es el deseo de cambiar y no poder
lograrlo. Al estar lejos de Dios nuestra mente es condicionada a creer que es
difícil cambiar y que los demás deberían aceptarnos.
No es cuestión de aceptación, pues Dios
nos ama como somos, pero es necesario cambiar para vivir en los propósitos y la
voluntad de Dios.
El pecado y las debilidades nos impiden
ver y vivir el plan de Dios para nuestras vidas. ¿Cómo puedo cambiar? El
temperamento puede explicar nuestro carácter o comportamiento, pero no es una
justificación para seguir siendo las mismas personas.
En realidad el temperamento no determina
lo que somos, pues si a esto añadimos la forma en que somos educados en
nuestros hogares, más las costumbres del lugar o país al que pertenecemos, y
nuestro entorno social, podemos entender por qué somos tan diferentes unos de
otros a pesar de tener temperamentos semejantes. Es interesante que nos
caractericemos en la conducta de acuerdo al país, comunidad o grupo social al
que pertenecemos.
Es la influencia externa (de la familia
y el mundo) más el temperamento lo que determina lo que somos, si así lo
aceptamos y vivimos.
En Cristo, ya no es el temperamento ni
la influencia del mundo lo que determina quienes somos, sino la acción del
Espíritu Santo en nuestras vidas.
El hecho es que Dios es poderoso, no
podemos compararnos a Él, pero sí podemos experimentar el poder de la
transformación por medio del Espíritu Santo.
Una Nueva Identidad en Cristo Dios nos
ha dado identidad, él es creativo y su gracia es multiforme, así que nos ha
creado a cada uno como personas diferentes y únicas. Al igual que las huellas
dactilares, el temperamento es una parte de nuestro ser que nos identifica.
Dios no desea anularnos, sin embargo,
cualquiera que sea nuestro temperamento, carácter o personalidad, Dios nos ha
llamado a ser santos e irreprensibles, eso implica tener que someternos a su
poder y ser transformadas para quitar todo lo que se opone a Él.
“Y el mismo Dios de paz os santifique
por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado
irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo.” 1 Tesalonicenses 5:23
Es posible disciplinar las debilidades
propias de cada uno con la ayuda del Espíritu Santo. Ser transformado por Dios
no significa perder la identidad sino encontrar la verdadera identidad en
Cristo Jesús.
Transformación:
Transformar -griego “metamorfo”,
significa hacer cambiar de forma a alguien o algo.
Transmutar o mudar.
“No os conforméis a este siglo, sino
transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para
que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.”
Romanos 12:2
La transformación a través del Espíritu
Santo en nuestras vidas consiste en renovar nuestro entendimiento (mente) para
actuar de una forma distinta, a partir de la persona que Él ha creado para ser
conforme a su imagen y semejanza en cuanto al carácter moral. Es un cambio que
produce fruto (Gálatas 5: 22 -23) porque es evidente. Esto significa que debo
someter mi vida bajo el control del Espíritu Santo para vencer mis debilidades
y combatir al pecado. Somos materia prima en sus manos.
Descubrir nuestras debilidades y la
necesidad de ser transformadas nos permite comprender cuanto necesitamos
depender de Dios.
“Bástate mi gracia; porque mi poder se
perfecciona en la debilidad.” 2 Corintios 12:9
La Transformación:
• Dependencia: cuando puedo
ver lo que soy delante de Dios y reconocer que lo necesito.
• Intervención del Espíritu
Santo: al rendir mi voluntad me habilita con su poder (La llave que
abre la puerta es la obediencia).
• Transformación:
termina en lo que Dios quiere de mí, una persona con fruto, llena del Espíritu
Santo. (Efesios 5:18) Espíritu Santo Dependencia Intervención (rendir la
voluntad) (poder) transformación debilidades fortalezas morir al pecado fruto
del Espíritu Es necesario cambiar para vivir en los propósitos y la voluntad de
Dios
GUIA DE REPASO
CAPITULO 2 “TRANSFORMADAS”
Completa los espacios en blanco.
1. Es necesario cambiar para
____________________________________________
2. El temperamento no determina lo que
somos, sino
3. Cualquiera que sea nuestro
temperamento Dios nos ha llamado a todas a ser (1 Tes. 5:23)
4. Explica que significa transformación
(Metamorfosis) a través del Espíritu Santo.
5. ¿Qué necesitas hacer para superar tus
debilidades?
“No os conforméis a este siglo, sino
transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis
cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.” Romanos 12:2
PLAN DE ACCION: Descubrir nuestras
debilidades y la necesidad de ser transformadas nos llevan a comprender cuanto
necesitamos depender de Dios. 2 Corintios 12:9.
• Estableciendo metas: ¿Cuánto necesitas
y estás dispuesta a depender de Dios?
SUJETA AL ESPIRITU
CAPITULO 3
Control – dominio, mando, control de sí
mismo. Dominio propio.
Sujetar – someter al dominio o mando de
alguien. Acatar, someterse, obedecer, depender.
Estar sujeta al Espíritu es poner
nuestra vida bajo el control o dominio del Espíritu Santo.
Esto requiere de una dependencia
absoluta y someter la voluntad propia a Él. Significa estar dispuesta a
abandonar el manejo de mi propia vida.
La llenura del Espíritu Santo trae
victoria sobre las debilidades de mi carácter (ira, pasividad, inestabilidad
emocional, inseguridad, temor, etc.).
Jesús prometió a los discípulos no
dejarlos solos mientras iba hacia el Padre. Enviaría al Espíritu Santo
para estar con nosotros. El propósito del Espíritu Santo es consolarnos,
enseñarnos todas las cosas, guiarnos a la verdad y ayudarnos en nuestra debilidad
(Juan 14: 1617, 26; 16:13).
“Y de igual manera el Espíritu nos ayuda
en nuestra debilidad;” Romanos 8:26
Mi fuente de poder es Dios
Hay tres acciones del Espíritu Santo:
• Él viene a mí cuando me convence de
pecado, de justicia y de juicio, es decir, me hace ver el pecado como
realmente es (muerte) y el castigo que merezco por practicarlo. Me conduce a
arrepentirme y reconciliarme con Dios por medio de Jesucristo. Juan 16:8
• Él está en mí, cuando procedo al
arrepentimiento y acepto a Jesucristo como mi Señor y Salvador, él entra a mi
vida por medio del Espíritu Santo. Apoc. 3:20
• El viene sobre de mí, ser lleno o
bautizado (Baptizo -inmerso), es la investidura de poder (dynamis; exousia –
autoridad). Hechos 1:8 “pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre
vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea,
en Samaria, y hasta lo último de la tierra.”
Esta es la llenura del Espíritu que
provoca un cambio (metamorfosis) radical de nuestras vidas. El único poder para
transformar nuestras vidas es el Espíritu Santo.
Las personas parecen o pueden cambiar a
través de otras personas o eventos claves, sin embargo, esos cambios están
limitados a ciertos aspectos de su vida, o bien, pueden ser temporales. Sólo
Cristo y el poder del Espíritu Santo pueden llevar a cabo una transformación
hacia una vida plena que no es temporal, sino progresiva y hacia la santidad.
Si dependemos totalmente de Dios no necesitamos un sicólogo, ni terapias
motivacionales, su poder es suficiente.
Producir fruto
El resultado de depender del Espíritu
Santo es recibir su llenura o plenitud. Esto a su vez produce fruto. (Gálatas
5: 22-23). Si estamos en Cristo, no podemos seguir siendo las mismas personas o
vivir inseparablemente con nuestros pecados y debilidades.
“... despojaos del viejo hombre... y
vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la
verdad.” Efesios 4:22-24 Mi fuente de poder es el Espíritu Santo
GUIA DE REPASO
CAPITULO 3 “SUJETA AL ESPIRITU“
Completa los espacios en blanco.
1. Ser sujeta o llena del Espíritu Santo
significa estar _________________________ por él.
2. Para ser controlada por el Espíritu
Santo debo estar ________________________ a abandonar el manejo o control de mi
vida.
3. Mi fuente de poder es:
________________________________, él me ayuda a vencer mis debilidades.
4. Uno de los propósitos del Espíritu
Santo es (romanos 8:26):
5. Cuando el Espíritu Santo “viene sobre
mí” significa ser: _____________________
6. La llenura del Espíritu Santo provoca
un cambio _________________________de mi vida.
7. Depender del Espíritu Santo también
produce ____________________en mi vida. No debo seguir siendo la misma
persona.
“Y de igual manera el Espíritu nos ayuda
en nuestra debilidad...” Romanos 8:26
PLAN DE ACCION
• Estableciendo metas: ¿Estoy dispuesta
a cederle a Dios el control de mi vida? Menciona contra que tienes que luchar
para lograrlo. Leer Romanos 7 y 8
VIVIR EN EL ESPIRITU
CAPITULO 4
Gálatas 5:16 “Digo, pues: Andad en el
Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.”
Gálatas 5:17 “Porque el deseo de la
carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se
oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.”
Este segundo texto nos habla de la
oposición que existe entre la carne y el Espíritu. Para algunos cristianos
puede ser una justificación para tolerar el coqueteo con el pecado y no vivir
en santidad.
¿Se puede vivir en el Espíritu? Si la
respuesta es no, ¿qué nos impide vivir en el Espíritu?
Analicemos los capítulos 7 y 8 de
romanos. (Leer capítulo 7 y 8 respectivamente). Romanos 7 Este capítulo se ha
prestado a controversia por mucho tiempo, en él encontramos nuevamente la
oposición entre la carne y el Espíritu.
Veamos 2 interpretaciones diferentes:
a) Una opinión ampliamente aceptada es que este capítulo
describe la vida de un cristiano y sus luchas con el pecado que lo acosa. Sin
embargo, hay que observar que esta es una opinión relativamente moderna.
b) La segunda interpretación describe la experiencia de un
pecador bajo convicción, quien actúa bajo la ley y que no ha experimentado el
evangelio. Esta interpretación es la que prevaleció durante los primeros siglos
del cristianismo en Europa, Inglaterra y Estados Unidos.
El apóstol Pablo describe a alguien cuyo
carácter habitual era estar bajo el dominio de la carne, y aunque se encontraba
bajo una fuerte convicción de pecado no era convertido. Tenía conocimiento de
la ley y probablemente Pablo hablaba de sí mismo antes de encontrarse con
Cristo, aunque no hay una afirmación para ello. Tener o estar bajo convicción
de pecado no significa ser cristiano.
No podemos estar “vendidos al pecado”
cuando hemos aceptado el rescate de Jesucristo.
Hay algunos principios a considerar para
interpretar el desarrollo de Romanos 7:
• El libre albedrío. Existe una
diferencia entre lo que se desea y lo que la voluntad elige finalmente. Dios
nos ha dado libre albedrío, la capacidad de decidir y actuar en la forma que se
considera más conveniente. Los seres dotados de razón son libres y no pueden
actuar en contra de su voluntad.
• Significado de la expresión “No
puedo”. Es común que las personas digan “Haría esto o aquello, pero no puedo”.
Esto significa que entienden lo que deben hacer y lo desean, pero deciden no
hacerlo. Ciertas decisiones implican un costo que realmente no queremos pagar.
“Porque lo que hago, no lo entiendo;
pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso hago”. Romanos 7:15
Si traducimos la palabra “quiero” como
una decisión, hay una contradicción en el hecho de que la voluntad gobierna la
conducta. Debemos entender que la palabra “quiero” se interpreta solo como un
deseo: “Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que deseo, sino lo
que aborrezco, eso hago”.
• La conversión es un cambio de decisión
que puede realizar la mente. Implica tomar decisiones en torno al bienestar
máximo de Dios y su reino. No podemos seguir pensando y actuando en función de
nuestro propio bienestar, felicidad, justicia, etc. Si es así, necesitamos
detenernos y reconsiderar nuestra conversión a Dios. La tentación pudiera
producir decisiones equivocadas (Santiago 1:4-5), pero si la voluntad de una
persona es recta, su conducta también será recta. Si no es así ¿Cuál es la
diferencia entre un convertido y un inconverso?
Un convertido no obedece “regularmente”
los mandamientos de Dios, sino siempre.
• La conciencia. Es la capacidad de
discernir la diferencia entre el bien y el mal. Sin la conciencia no se podría
producir convicción de pecado en el pecador.
Romanos 8 En este capítulo Pablo habla
de “Vivir en el Espíritu.”
• La vida cristiana es vivir en el Espíritu
para ser guiado permanentemente por Él. Romanos 8:1-5
• Romanos 8:2 Vivir en el Espíritu
significa ser librado de la ley del pecado y de la muerte. Ezequiel 18:4 “El
alma que pecare, esa morirá”.
• La ley del Espíritu de vida de Cristo
me muestra que lo necesito a Él para vencer la ley del pecado. “Mas vosotros no
vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios
mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él.”
Romanos 8:9
• Ya no vivimos bajo las obras de la
carne.
• Romanos 8:37 “Antes, en todas estas
cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.”
Conclusión
Hay una diferencia entre vivir bajo la
ley y vivir bajo la gracia. Vivir bajo la ley es intentar cumplirla en nuestras
propias fuerzas, vivir bajo la gracia es cumplir la ley a través de Jesucristo.
Necesitamos a Cristo para vivir en el
Espíritu. El versículo clave es Romanos 7:25
Romanos 7:25 “Gracias doy a Dios, por
Jesucristo Señor nuestro.” Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de
Dios, mas con la carne a la ley del pecado.
Romanos 8: 3 Porque lo que era imposible
para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en
semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la
carne; Romanos 8:4 para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que
no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.
Romanos 8:5 Porque los que son de la
carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las
cosas del Espíritu.
No confundir la santidad con el deseo de
ser santos, esto es auto engaño. No es suficiente desear vivir en santidad,
sino decidir hacerlo. Vivir en el Espíritu produce una transformación con
respecto al pecado
GUIA DE REPASO
CAPITULO 4 “VIVIR EN EL ESPIRITU”
Completa los espacios correctamente.
1. Gálatas 5:17 “Porque el deseo de la
carne es ______________ el Espíritu, y el del Espíritu es _______________ la
carne”
2. Estar bajo convicción de pecado no
significa ______________________________________________________________.
3. Si he aceptado el rescate de
Jesucristo _______________________________________”vendida al pecado”.
4. Existe una diferencia entre lo que
___________________________ y lo que la voluntad ___________________. Los seres
dotados de razón son libres y no pueden actuar ________ ________________de su
voluntad.
5. La expresión “No puedo” significa:
_________________________________________
6. La conversión es un cambio de
____________________ que puede realizar la __________________.
7. Un convertido no obedece
________________________________ los mandamientos de Dios, sino siempre.
8. Vivir en el Espíritu es ser guiado
______________________________ por Él y me libra de la ley de
_______________________________________________________.
9. Romanos 8:9 “Mas vosotros no vivís
según la carne, sino según _________________
____________________, si es que el
Espíritu de Dios __________________ en vosotros.”
10. Necesitamos a ___________________
para vivir en el Espíritu.
11. No confundir la santidad con el
_____________________de ser santos, esto es
__________ _______________________.
“Más vosotros no vivís según la carne,
sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si
alguno no tiene el Espíritu de Cristo no es de él.” Romanos 8:9
PLAN DE ACCION
Examinar si vivo en una continua lucha y
termino siendo vencida por los deseos de la carne. ¿La convicción de pecado en
mi vida me ha llevado a una conversión verdadera?
• Estableciendo metas: Si reconozco y
valoro el rescate de Cristo, ya no estoy “vendida al pecado” y puedo Vivir en
el Espíritu. ¿Cuál es mi compromiso con Dios para obedecer siempre sus
mandamientos?
MÁS QUE VENCEDORAS
CAPITULO 5 (Venciendo mis debilidades y
el pecado)
Romanos 7:14 “Porque sabemos que la ley
es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado.”
Este versículo ha creado controversia
cuando se supone que describe la experiencia de un cristiano. La palabra
“carnal” la utiliza Pablo una sola vez en referencia a los cristianos, y por
tanto, en referencia a personas que estaban en un estado muy bajo de
cristianismo. 1Corintios 3: 1-4
1 Corintios 3:3 “porque aún sois
carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no
sois carnales, y andáis como hombres?” Los cristianos “carnales” no viven en el
Espíritu, pero pueden auto engañarse diciéndose cristianos sin haber una
verdadera conversión, es decir “un cristiano falso”.
Un cristiano “carnal” está gobernado por
sus deseos y emociones, y toma decisiones en base a éstos. Cuando utilizamos el
término “carnal” hablamos de falta de carácter.
Progreso bajo la sujeción en el Espíritu
Progreso bajo los deseos de la carne
“Porque los que son de la carne piensan
en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del
Espíritu.” Romanos 8:5
“Pensar” del griego fronéo significa
ejercitar la mente, entretener o tener un sentimiento u opinión; por
implicación estar dispuesto (mentalmente).
Lo podemos traducir de la siguiente
manera: “Los que son de la carne ejercitan la mente en las cosas de la carne;
pero los que son del Espíritu, (ejercitan la mente) en las cosas del Espíritu”.
“Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no
satisfagáis los deseos de la carne”. Gálatas 5:16
La palabra “deseo” en griego es
“epithumia” (epidsumia), concupiscencia, deseo por lo prohibido.
Un cristiano que vive en el Espíritu
debe ser un cristiano firme, que desarrolla carácter (de Cristo) para tomar las
decisiones correctas de acuerdo a la voluntad de Dios y no conforme a sus
deseos. Debemos andar como Cristo.
¿Qué me impide ser llena del Espíritu
Santo?
El pecado. El primer paso es reconocer
el pecado en nuestras vidas, arrepentirse y pedir que Dios nos limpie con su
sangre preciosa.
Si estamos dispuestas a someternos a
Cristo debemos reconocer que la única fuente de poder es Dios, quien actúa en
nuestras vidas a través del poder del Espíritu Santo.
¿Las debilidades del temperamento son
pecado? Podemos decir que nuestras debilidades son fragilidades o áreas
vulnerables en nuestra vida, no son pecados. Sin embargo, una debilidad sin control
o dominio y que se repite vez tras vez, se convierte en un mal hábito, y un mal
hábito se convierte en pecado.
Por ejemplo, si existe una tendencia a
ser hipersensible, sin el control de Dios esta sensibilidad puede conducir a
especular que la gente siempre pretende herirnos. Esto pone los ojos sobre la
persona misma, convirtiéndose en una persona egoísta y a la vez desarrolla un
espíritu de juicio y crítica en contra de los demás. Si la tendencia es
irritarse o desesperarse fácilmente, lo más seguro es que el pecado es la ira o
la falta de misericordia.
• Un patrón de conducta que se repite
constantemente, día tras día, se convierte en un hábito. Un hábito que se
alimenta de los deseos de la carne y las emociones se convierte en pecado. Los
hábitos practicados repetida y constantemente se reproducen en “automático”,
sin pensar. Cuando se vive en la carne pecamos en “automático”, apagamos la
conciencia. Cedemos la voluntad al pecado. Ejemplo: un niño que comienza a
robar del monedero de su mamá.
Romanos 7:17 “De manera que ya no soy yo
quien hace aquello, sino el pecado que mora en mí.” Romanos 7:21 “Así que,
queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí.”
La práctica continua del pecado nos
conduce a pensar lo siguiente: “el mal está en mí”. Es el hombre quien decide
abrir la puerta para que el pecado entre a morar. Para el cristiano, quien debe
morar en nosotros es Cristo y no el pecado.
• Por eso al venir a Cristo debemos
renovar nuestra mente con la Palabra de Dios. “No os conforméis a este siglo,
sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que
comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta”. Romanos
12:2
• ¿A qué pecado nos conducen nuestras
debilidades fuera de control? La intolerancia, pasividad, perfeccionismo,
emociones y deseos sin gobernar alimentan pecados como:
“Y manifiestas son las obras de la
carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría,
hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones,
herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a
estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los
que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.” Gálatas 5:19-21
Hábitos que se transforman en pecado:
• Temor o ansiedad. 2 Tim. 1;7 Porque no
nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio
propio.
• Duda o incredulidad. Rom. 14:23b “y
todo lo que no proviene de fe, es pecado.”
• Negligencia. Santiago 4:17 “y al que
sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.”
Todo lo que me impide tener una buena
relación con Jesucristo es pecado Las excusas del pecado
• Todo el mundo lo hace (no hay
convicción de pecado)
• No es tan malo (minimizar el pecado)
• No hay que ser tan religioso (tibieza,
mediocridad)
• Hay peores pecadores que yo (“No soy
tan malo”)
• No pasa nada (devalúan el sacrificio
de Cristo)
• Los demás me hacen pecar
(condescendencia, irresponsabilidad)
• No puedo (No quiero)
Todas estas excusas revelan que el
corazón ama más al pecado que a Dios y que no queremos ser responsables ante
Él. No hay excusa para el pecado. El hombre decide pecar.
No contristar al Espíritu Efesios 4:30;
1 Tes. 5:19
• Cada vez que actuamos bajo el dominio
de las emociones y la carne contristamos al Espíritu Santo. Si hay un pecado al
que no queremos renunciar también apagamos (alejamos) al Espíritu.
La mayor debilidad a vencer en cada
temperamento
Ser llenas del Espíritu Santo significa
que Dios trae balance a mi vida. Él es capaz de neutralizar a una obsesiva
perfeccionista para dar paso a una eficiente administradora; a una detestable
mandamás en una excelente directora, a una pasiva indiferente en una paciente
y sabia consejera.
• Melancólica: necesita
vencer su espíritu crítico, dejar de vivir centrada en sí misma, desarrollar un
espíritu agradecido (1 Tesalonicenses 5:18). Este temperamento tiene mucha
riqueza potencial. Por su fidelidad natural al entregarse a Cristo puede
convertirse en una mujer dedicada y devota a Dios.
• Flemática: debe
vencer su egoísmo e indiferencia, dejar de actuar como si fuera cristiana y
confiar verdaderamente en Dios, renunciar a su pasividad y temores.
• Esta mujer es quien probablemente
mejor se relaciona con sus semejantes por su naturaleza placentera y
equilibrada. Es una persona con mucha capacidad si permite que Dios la controle.
• Colérica: su primera
necesidad es vencer la ira, la excesiva confianza en sí misma y su
insensibilidad a las necesidades ajenas. La creatividad y productividad de esta
mujer puede superar en mucho a los otros temperamentos, sin embargo, cuando
permita que el Espíritu Santo transforme su corazón para amar y ser
misericordiosa, será una eficaz obrera en la causa de Jesucristo.
• Sanguínea: necesita vencer
las emociones fuera de control e indisciplina. El Espíritu Santo la puede
transformar en una mujer confiable y fiel. Tiene el potencial para ser una
cristiana productiva si desarrolla disciplina bajo el control del Espíritu
Santo.
Ríndete al Espíritu Santo
Es necesario reconocer tu pecado y
debilidades y entregarlos al Espíritu Santo.
Rendirte a Dios...
• Significa que Él gobierna nuestra
mente por medio de la influencia del Espíritu Santo.
• Es obedecer por el poder del Espíritu
Santo.
• Es obtener victoria sobre el pecado y
es fácil servir a Dios. Mateo 11:30 porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.
1 Juan 5:3 Sus mandamientos no son gravosos.
• Es justicia, gozo y paz. Romanos 14:17
“porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en
el Espíritu Santo”. Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por
medio de aquel que nos amó Romanos 8:37
GUIA DE REPASO
CAPITULO 5 “MAS QUE VENCEDORAS”
Escribe las palabras correctas en los
espacios en blanco.
1. Un cristiano “carnal” es un cristiano
_______________________.
2. Escribe Romanos 8:5
3. Un cristiano firme desarrolla el
________________________________ de _______________________.
4. El ___________________________ me
impide ser llena del Espíritu Santo.
5. Describe qué es un hábito:
____________________________________________
6. Romanos 7:17 Cuando vivimos en la
carne pecamos en “____________________”
7. Menciona como un hábito que se
transforma en pecado
8. Todo lo que me impide tener una buena
relación con Jesucristo es _________________.
9. Menciona 3 excusas para el pecado:
10. El hombre decide
_____________________. Las excusas por el pecado revelan que el corazón ama más
al ____________________ que a Dios.
11. Cada vez que actuamos bajo el
dominio de la carne ________________________ al Espíritu Santo. El pecado
continúo __________________ al Espíritu.
12. Rendirme al Espíritu significa: -Que
Dios gobierna mi ____________ a través de la influencia el Espíritu Santo
__________________. Tener victoria sobre ______ __________________ y es
fácil ___________ a Dios. Justicia, ____________ y paz.
”Antes, en todas estas cosas somos más
que vencedores por medio de aquel que nos amó.” Romanos 8 37
PLAN DE ACCION
Anota la mayor debilidad a vencer y como
te visualizas al traer Dios el balance a tu vida.
•Estableciendo metas: Ora a Dios que te
muestre concretamente que debes hacer o dejar de hacer para que el Espíritu
Santo actúe en ti.
FRUTO DEL ESPIRITU
CAPITULO 6
Para muchos vivir en el Espíritu está
relacionados con señales, manifestaciones y dones del Espíritu Santo (Romanos
12: 6-8) 1 Cor. 12: 1-10).
Sin embargo, el capítulo 8 de romanos,
titulado “Vivir en el Espíritu” no habla de dones y manifestaciones, sino de la
victoria sobre el pecado, esto nos lleva a adentrarnos al tema del carácter de
un hijo de Dios.
Esto no significa que no deseemos las
manifestaciones y los dones, Pablo dijo que los deseáramos (1 Corintios 14:1).
El punto es que todo siervo que desarrolla y administra los dones del Espíritu
Santo debe también tener el carácter de Cristo.
El que sirve, el que enseña, el que
administra, el que profetiza, el que sana, etc. debe tener carácter de Cristo
(1 Corintios 14; 32, 37). Si no es así, es mejor no entorpecer la obra del
Señor. (1 Corintios 13:2).
Para vivir en la plenitud del Espíritu
debemos comenzar por desarrollar el carácter de Cristo (producir fruto), los
dones son un regalo que vendrán en consecuencia.
Carácter: es una señal o marca que
distingue, es la evidencia de lo que tú eres.
Fruto: griego “Karpós”, producto o
resultado obtenido.
“Mas el fruto del Espíritu es amor,
gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra
tales cosas no hay ley.” Gálatas 5:22-23
¿Se pueden tener dones y manifestaciones
y no vivir en santidad?
Se puede tener los dones pues son
irrevocables (Romanos 11:29), sin embargo, al estar mal administrados no
edificarán al cuerpo de Cristo. Irrevocable es que Dios te entrega algo de lo
que eres responsable y darás cuentas a Él. El Espíritu Santo es contristado al
ir en contra de su voluntad, deja de manifestarse y se aleja si no atendemos a
su voz (1 Tesalonicenses 5:19).
Dios demanda en vivir en santidad. El
estándar de santidad es Cristo. Esto es producir fruto.
• Las manifestaciones y dones del
Espíritu Santo. Estas son señales o manifestaciones externas y efímeras. No te
deslumbres ante esto, busca primero la gracia y el poder de Dios para
transformar tu corazón, de adentro hacia afuera, y no solo por fuera. La
santidad es una señal permanente. La gracia de Dios no es libertad para pecar
sino una motivación para vivir en santidad. Asegúrate de tener la gracia de
Dios sobre tu vida y la santidad como una manifestación del Espíritu.
• La responsabilidad. Si Dios se muestra
a nuestras vidas con dones y manifestaciones debemos ser mayormente
responsables de tener el carácter de Cristo para administrar sabiamente lo que
él nos da (1 Corintios 12:7 “Pero a cada uno le es dada la manifestación del
Espíritu para provecho”). Dios no es irresponsable, nosotras no debemos ser
irresponsables. Lamentablemente, ministros de Dios que se mueven en los dones y
grandes manifestaciones del Espíritu, terminan en un mal testimonio por la
falta de carácter y han entorpecido la obra de Dios.
Es una irresponsabilidad ministrar o dar
palabras proféticas si nuestras vidas no están bien delante de Dios, porque
tarde o temprano esto daña la obra del Señor, derriba ministerios y vidas. Es
mejor no dar algo de parte de Dios si no estás bien con Él. (1 Corintios 14:32 “Y
los espíritus de los profetas están sujetos a los profetas”). Dios está
probando la obediencia de tu corazón y viendo si haces lo correcto. ¿Sabes
escuchar al Señor cuando es tiempo de disciplina?
A Dios le interesa más tu corazón que
tus dones, si tienes que callar o quedarte quieta, Dios puede intervenir o
hablar mejor que tu. Desgraciadamente los ministerios de “aparador” (milagros,
sanidad, profecía, etc.) parecen creer que son intocables y no necesitan
autoridad. También requieren autoridad y disciplina. 1 Corintios 14 nos exhorta
al orden y sujeción, lo que incluye callar sabiamente.
• ¿Buscas los dones? Mira primero la
vida de los siervos de Dios en la Biblia, incluyendo a apóstoles y profetas. Sé
íntegra delante de Dios. No puedes atreverte a dar una revelación o enseñanza
si tu vida con el Señor es pobre, si oras y lees de vez en cuando o 15 minutos,
si no escudriñas (estudias) la Palabra y no ayunas. Apocalipsis 19:10 “Adora a
Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía.”
• La máxima revelación de Dios a tu vida
es la Palabra. Cuando decides obedecer, el poder de Dios actúa en tu vida,
transformándola de logos (la Palabra dicha o hablada) a rhema (la Palabra
viva). ¿Cómo desear los dones cuando desechamos la Palabra de Dios?
• El fruto del Espíritu. Gálatas 5:22-23
“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad,
fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.”
El fruto del Espíritu es también una
señal, es el resultado de depender de Él para ser como Cristo. No es suficiente
con dejar de practicar el pecado, sino que tenemos que aprender a hacer el bien
en la voluntad perfecta de Dios.
El fruto del Espíritu es la señal que manifiesta
lo que somos. Es una señal interna y permanente que sale al exterior. (Mateo
7:20 “Así que, por sus frutos los conoceréis.”)
• Templanza. Es interesante que el
resultado de vivir en el Espíritu termina con templanza (griego “enkratéia”)
que significa dominio propio. La raíz griega da a entender refrenamiento de sí
mismo en cuanto a los deseos y concupiscencias. Vivir en el Espíritu trae
dominio propio a tu vida. Este es el carácter que Dios quiere desarrollar en
ti, andar como Cristo y no como los hombres.
Cristo quiere desarrollar su carácter en
mí
GUIA DE REPASO
CAPITULO 6 “FRUTO DEL ESPIRITU”
Completa correctamente los espacios en
blanco.
1. Todo don o ministerio requiere
desarrollar el carácter de ______________________.
2. Para vivir en la plenitud del
Espíritu debo comenzar por producir ________________.
3. Los dones son _____________________ y
soy responsable de dar _______________ a Dios por ellos.
4. Menciona qué es carácter:
5. La santidad es una señal
________________________.
6. La máxima revelación de Dios a mi
vida es ______ ___________________________ _______ ______________.
7. No es suficiente dejar el ____________________
sino aprender a hacer ________ ________________ en la ____________________
perfecta de Dios.
8. Cristo quiere
_________________________ su carácter en mí.
“Mas el fruto del Espíritu es amor,
gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra
tales cosas no hay ley.” Gálatas 5:22-23
PLAN DE ACCION
¿Está la marca de Cristo en ti? Mateo
7:20 Menciona fruto o frutos por los cuales eres conocida como hija de
Dios. Ups!
Reflexiona y ora al Señor respecto al
fruto del Espíritu en tu vida.
• Estableciendo metas: Pedir al Espíritu
Santo que desarrolle templanza en ti. Menciona en q áreas de tu vida la
necesitas:
COMO VIVIR EN EL ESPIRITU
CAPITULO 7
La victoria sobre todas las
circunstancias de la vida depende de nuestro andar en el Espíritu. Hemos
tratado ampliamente que significa ser llena, estar sujeta y vivir en el
Espíritu. Hay un resultado en esto que queremos alcanzar.
Concluiremos esta enseñanza con los
pasos prácticos de cómo vivir en el Espíritu.
1) Recibe la salvación de Jesucristo. Entrega
tu vida al Señor, él es el único que perdona y limpia nuestros pecados. 1 Juan
1:9; Romanos 10:9
2) Vive bajo el control del Espíritu Santo. Entrega
todo aquello que es un estorbo entre tú y Dios. Cede el control de tu vida y
permite que él te gobierne. No contristes al Espíritu.
3) Lee la Palabra. La máxima revelación de Dios a tu vida es la Palabra.
Está a tu alcance. La Palabra es una prioridad en tu vida. “En mi corazón he
guardado tus dichos, Para no pecar contra ti.”Salmo 119: 11 Esto significa
ocuparte en las cosas del Espíritu, ejercita tu mente con la Palabra día tras
día para que seas renovada y comprendas el propósito de Dios para ti.
4) Mantén una vida de Oración. Alimenta una continua comunión con
Dios. No te separes de Él para que permanezca contigo en todo momento.
“Permaneced en mí, y yo en vosotros”. Juan 15:4
5) Ayuna. El ayuno es un arma espiritual
para vencer las tentaciones. Someter nuestra carne a Dios a través del ayuno
permite que el poder del Espíritu Santo doblegue nuestros deseos y trae dominio
propio sobre el cuerpo. “¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las
ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los
quebrantados, y que rompáis todo yugo?” Isaías 58:6
6) Obedece la voluntad de Dios. La maldición de Eva fue la falta de sujeción. Rompe con
esa maldición. “Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios,” 1 Samuel
15:22
GUIA DE REPASO
CAPITULO 7 “COMO VIVIR EN EL ESPIRITU”
Menciona los pasos prácticos para Vivir
en el Espíritu:
1. ____________________________________________________________.
2. ____________________________________________________________.
3. ____________________________________________________________.
4. ____________________________________________________________.
5. ____________________________________________________________.
6. ____________________________________________________________.
“No os embriaguéis con vino, en lo cual
hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu.” Efesios 5:18
PLAN DE ACCION
Describe la(s) experiencia(s) que Dios
ha traído a tu vida a través de esta enseñanza:
• Estableciendo metas: Haz un compromiso
con Dios respecto a no seguir siendo la misma persona y permitir que el
Espíritu Santo tome tu vida.
CONCLUSIÓN
Debemos ser capaces de “Vivir en el
Espíritu” en una actitud mental y espiritual para que sea evidente en nuestra
conducta práctica. Esto solo se obtiene a través de una relación personal con
Dios cada día. No es más espiritual la mujer que experimenta los dones y las
manifestaciones externas del Espíritu, sino aquella que valora y comprende la
gracia de Dios como una motivación para vivir en santidad para honrar y exaltar
a Dios.
Esta es la señal o la marca de una mujer
cristiana que al ser transformada es capaz de influenciar a su propia familia y
a los que están a su alrededor a vivir conforme a los principios y los
propósitos de Dios.
El reto para nuestras vidas es vencer al
pecado para vivir en los propósitos de Dios. “No que lo haya alcanzado
ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para
lo cual fui también asido por Cristo Jesús.
Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo
ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y
extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo
llamamiento de Dios en Cristo Jesús”. Filipenses 3: 12-14
BIBLIOGRAFIA
1. La Santa Biblia RV60
2. Beverly LaHaye, “La Mujer Sujeta al
Espíritu”, Ed. Caribe 1996
3. Charles G. Finney, “El verdadero
Arrepentimiento”, MBR 2003, 113-140.