TE INVITO A REPETIR ESTA PEQUEÑA ORACION

Quiero saludarte y decirte que eres muy importante para Dios, Quiero  orar por ti y tu familia.

Muchas cosas en la vida nos pueden desviar del propósito de Dios y uno puede llegar al punto de querer alejarse del camino verdadero. Te escribo tres aspectos  que tienes que tomar en cuenta en los momentos donde uno se aleja de la presencia de Dios.
1.- El arrepentimiento: “…y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti”.  Lucas 15.18 B

2.- Decisión de regresar:” Me levantaré  e iré a mi padre,…” Lucas 15:18

3.-  La acción causada por la decisión y el arrepentimiento: “Y levantándose, vino a su padre. Y cuando estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, corrió, y se echó sobre su cuello, y lo besó”. Lucas 15:20 Dios te recibirá con los brazos abiertos, Él siempre te  estará  esperando, no tengas miedo y regresa que tu Padre está a la puerta  para recibirte y darte los privilegios  como su  hijo.

Si necesitas regresar a los pies del Maestro, te invito a repetir esta pequeña oración escrita.

Padre Santo, hoy me encuentro como aquel joven llamado el “hijo pródigo”,  me encuentro deseando regresar de nuevo a tu casa, a la comunión con tu presencia, al redil de los redimidos por la sangre del Cordero. Pareciera que hoy mis pecados pesan más que antes, que fuesen más difíciles de ser borrados y perdonados, sin embargo no tengo otra alternativa, y sé que no hay otro camino.

Señor hoy reconozco que te necesito profundamente, que en verdad separado de ti nada puedo hacer, y que he comprobado que mi corazón es malo, yo mismo estoy  vendido  al pecado como dijo el apóstol Pablo, pero hoy te ruego que me limpies y me restaures, que borres mis rebeliones y perdones la infidelidad y la maldad de mi corazón.

Reconozco y confieso hoy mis pecados delante de ti (Se especificó mencionando los pecados), me acojo a la gracia y poder disponible por medio del Señor Jesucristo.  Restáurame, oh Señor, a la comunión de tu Espíritu Santo, y derrama de tu poder y  renueva mi ser. Alumbra mi  entendimiento con tu palabra de verdad, y guíame en los pasos específicos que debo dar de ahora en adelante en cada aérea de mi vida. Te lo ruego Padre, en el nombre de Cristo Jesús, mi Señor y Salvador. 

Amén.  

Sin más que decirte me despido deseándote el mayor de los éxitos en todos los desafíos que tengas por delante.

TE PUEDE INTEREZAR