Te has sentido alguna vez como que la vida
te ha paralizado? Has pensado que la vida está llena de posibilidades pero que
no es para ti? Hay muchas personas que se encuentran detenidas en la vida, hay
personas que no saben qué hacer, qué han sido abandonados por su
pareja, que perdieron el trabajo, que están endeudados, que todo le sale mal,
que no tienen para comer, se sienten desesperados lo único que alcanzan a
ver son problemas y más problemas.
El destacado líder y escritor John C.
Maxwell dice: “La gente no necesita cambiar sus problemas, sino sus
perspectivas”. Creo particularmente que necesitamos cambiar nuestra manera de
pensar de la vida, los problemas fueron hechos para resolverse, hasta la muerte
tiene solución porque si estas en Cristo debes saber que tienes vida eterna,
entonces te pregunto:
Por qué haces que tu vida se detenga? Porque caer en un negativismo? Si tú
piensas que algo va a salir mal de seguro va a salir mal.
La Biblia dice: “Lo que el impío teme, eso
le vendrá; Pero a los justos les será dado lo que desean.” Proverbios
10:24.
Mi pregunta ahora: Que es lo que usted desea en la vida? Desea seguir
detenido o desea seguir avanzando sin importar las crisis, los problemas y los fracasos? Le
tengo una mala y una buena noticia, la mala es que los problemas siempre
van a existir mientras vivas en esta tierra y la buena es que tú tienes la
capacidad de salir adelante. Tu puedes elegir quedarte desplomado pensando que
el mundo se acabó, llorando desconsoladamente, esperando a ver si tus
amigos te ayudan en ese momento difícil o también puedes elegir buscar a Dios,
buscar su sabiduría y buscar las oportunidades para mostrar las virtudes y los
talentos que El te ha dado.
Alguien dijo: “La adversidad tiene el don
de despertar talentos que en la prosperidad hubiesen permanecido durmiendo.”
Aquí hay algunas ideas que pueden ayudarte a que tu vida continúe:
Piense en el fracaso como una enfermedad para la cual existe una vacuna. El
hecho de fracasar no significa que eres un fracasado. Si fracasaste en un
negocio no significa que no sirves para los negocios, igual se aplica a una
relación. Podemos aprender de los fracasos. Cuando aprendemos de ellos somos
fuertes. “Porque siete veces cae el justo y se vuelve a levantar; pero los
impíos se hunden en la desgracia” Proverbios 24:16.
Considere la posibilidad de que aunque tarde en cumplirse el sueño un día va
a cumplirse. No te desesperes, llénate de paciencia pero no te quedes
quieto, persevera en tu misión de vida. La vida es un proceso y nunca nada
grande se logró de inmediato, se requiere trabajo, tiempo, talento y
tesoro. La mayoría de las personas quieren que las cosas se les solucionen de
inmediato cuando el problema lleva tiempo arraigado en su vida, hay que
trabajar en nuestra vida primeramente y luego con la gente que me rodea.
Considere ser una persona de fe, nunca es tarde para alcanzar sus sueños. Nunca
es tarde para salvar su matrimonio, nunca es tarde para llegar a acuerdo con
sus acreedores y cancelar sus deudas, nunca es tarde para comenzar e intentarlo
de nuevo.
Quítese la etiqueta de perdedor o
perdedora, evite caer en la autocompasión. La
realidad es que todos fallamos, caemos, tropezamos y cometemos errores. Lo
importante no es la caída sino cuantas veces te levantes. Las caídas son parte
de nuestro aprendizaje a caminar, por supuesto que duelen pero no caigas en
“pobrecito o pobrecita yo” “Soy un fracaso” “Nadie me quiere”. “No me vuelvo a
enamorar”. Practique el juego. Que tal…mi matrimonio es una bendición, mi
negocio está creciendo, tengo excelentes amigos, soy un ganador, soy libre de
deudas, colóquese la etiqueta de ganador.
Evite ser una persona reactiva, conviértase en una persona proactiva. La
mayoría de las personas en los momentos de crisis su tendencia natural es a
reaccionar, desarrollando sentimientos de frustración y contrariedad, luego
pasan a la duda y pánico, quedando paralizados. La vida es 90% de como
reacciono ante las circunstancias. Antes que reacciones con temor y ansiedad,
actúa dando pasos alentadores y audaces hacia adelante.
“No podemos dirigir al viento, ni nadie puede hacer que amanezca, pero si
podemos ajustar las velas y disfrutar cada despertar.” Stephen Covey
Para ajustar las velas y disfrutar cada despertar haz lo siguiente: Amate
a ti mismo y suelta tu pasado (fracaso).
Nada puedes hacer para cambiarlo, el pasado
no vuelve. Lo que si puedes hacer es vivir el presente y anticipar el
futuro. No vivas pensando en lo que pudo haber sido, valora la vida que tienes.
Fortalécete en las promesas de Dios. No te quejes de la situación, deja de
enfocarte en los problemas y busca las bendiciones que Dios te ha dejado en su
Palabra. Aduéñate de las promesas de Dios.
Hazte preguntas que te lleven a mejores
elecciones. En vez de sentirte preocupado por los
problemas, atemorizado por la situación que está viviendo, tómese el tiempo
para estudiar y analizar lo que está viviendo. Hazte preguntas tantas veces
como quieras hasta que encuentres las respuestas que te ayude a elegir el
futuro que deseas. ¿Qué haría Jesús en esta situación? ¿Qué puedo aprender de
todo esto?
Busca las oportunidades y diseñe un plan de acción de cinco pasos. Cada día
sale el sol, así que hoy es el mejor día para comenzar de nuevo. La fe sin
obras es muerta.
Recuerde, usted puede convertir el fracaso en un triunfo. El
fracaso no as una condición permanente. Es posible re-inventarse, aplicar la resiliencia.
No importa lo que haya pasado, todo eso queda atrás tiene opciones y el poder
de elegir. La clave es cultivar el arte de ver los problemas. Deje de vivir con
la creencia de que está ‘desamparado’, ‘arruinado’, que es ‘un
fracaso’. Cambie todo eso por la idea de que está listo para el
trabajo, sus finanzas están sanas, su familia es la mejor. Piense en actividad,
movimiento; visualize: trabajo y servicio. Confía en que Dios está contigo
y verá que todo llega a realizarse.
Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo
aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito. Romanos 8:28 (NVI)
Finalmente, recuerde que la vida continua, la vida no se detiene, su
corazón sigue latiendo, si quiere mejorar su vida debe avanzar, aun arriesgarse
al fracaso., obtenga la vida que desea.
¡Viva
la vida con entusiasmo!
Hola, espero que estés bien, al igual que disfrutes de esta publicación, no olvides dejar tu comentario que Dios me los bendiga siempre